HISTORIA
El Buenos Aires Rowing Club fue fundado en 1873 por ciudadanos ingleses radicados en nuestro país. El 12 de diciembre de ese año se llevó a cabo la primera regata formal sobre el Río Luján. El acontecimiento fue presenciado por el presidente de la Argentina Don Domingo F. Sarmiento quien, antes de retirarse, pronunció este recordado discurso.
Estoy deleitado con la fiesta de hoy, acaso más de lo que podéis creerme. He venido complacido como Socio Honorario de este Club para presenciar la inauguración de un nuevo género de diversión en este país. Vuestros intrépidos antepasados debieron mucha de su grandeza a la destreza y osadía en el mar y los robustos británicos del presente han conservado el físico fino de la raza mediante estas diversiones dignas de una nación viril, libre y enérgica. Para mí, que estoy envuelto en los graves cuidados del cargo, es reconfortante venir aquí y tomar parte en estos deportes varoniles que realizan el aforismo de los antiguos: "Mens sana in corpore sano". Ojalá lograse entrar en la juventud argentina la imitación de este ejemplo para injertar en nuestra naturaleza un amor por el elemento glorioso que ha hecho de nuestro país lo que es y que es padre del comercio, riqueza y prosperidad. Este es verdaderamente para mí un día que será marcado con piedra blanca y entretanto os agradezco cordialmente por el placer que me habéis proporcionado: bebo al éxito del Club de Botes del Tigre
Domingo Faustino Sarmiento
Remeros participan de una regata en el Río Luján, 1899
Tres días después, el 16 de diciembre de 1873, un grupo de 80 caballeros en su mayoría británicos se reunieron en el Café «Gymnasium», ubicado en la calle Florida, entre Corrientes y Cuyo (hoy Sarmiento). Aquellos deportistas de la regata del Tigre, vestidos ahora con elegante formalidad y reunidos en pleno centro de la Capital, actuaron con prontitud y eficiencia. Dispuestos a organizar a los remeros que se habían reunido en camaradería y fraternidad sobre el Río Luján, fundaron, siguiendo el modelo de su país natal, un Club con todas las características de una verdadera institución de remo: el Buenos Aires Rowing Club.
Decano de los clubes de remo, nació como un pequeño enclave británico en nuestro país. Le fue dado un nombre inglés, el primer presidente de la Honorable Comisión Directiva fue el Ministro Británico Lionel Sackville West y el Cónsul Británico, su primer vicepresidente, Ronald Bridgett.
Su primer local fue un viejo barco llamado “Sunny South” hasta que, poco después, Don Leonardo Pereyra cedió a préstamo al club un terreno de su posesión a la vera del Riachuelo, entonces límpida corriente de agua. Allí se construyó una casa de madera con techo de chapas y una ancha entrada que le daba apariencia de un casco de tradicional estancia criolla.
En 1876 se produce la primera expansión y constituye su sede en Tigre. Luego, en 1885 se adquiere —con notable visión de futuro— un lote de 1600 metros en la misma localidad donde en 1887, se aprueba el proyecto presentado por Carlos A. Altgelt y comienza la construcción del edificio.
En 1895, el local del Riachuelo se muda a una chata cedida por el Gobierno Nacional: la “General Alvear” que estaba fondeada en la Dársena Sur de Puerto Madero. El Club permaneció en ella hasta el año 1902, ocasión en la que pasó a ocupar -en la margen opuesta- un galpón cedido por la Municipalidad de Buenos Aires, el cual había pertenecido a los Mataderos.
En 1906, el Buenos Aires Rowing Club encargó la obra del nuevo edificio del Club en Tigre al arquitecto Roberto H. Lomax, con el asesoramiento de Carlos Agote, Ernesto D’Anvers y Carlos Maschwitz. Comenzaron demoliendo la casa principal que llevaba casi 18 años de uso, haciéndose un pequeño homenaje al arquitecto Carlos Altgelt, socio honorario desde 1899. El edificio queda concluido en el año 1912.
Posteriormente, en 1923 y bajo proyecto y dirección del Arq. Miguel Madero, quién luego fuera también Presidente del Club, se procedió a la remodelación integral y ampliación de la Sede de Tigre. Esta modificación de la fachada principal logró el aspecto de gran mansión Victoriana que hoy podemos observar.
En 1930, se realizó el galpón de botes y dormitorios para remeros, obras necesarias que dieron respuesta al constante desarrollo y crecimiento del remo, deporte principal y esencia de nuestro club. Más tarde se ejecutaron tres canchas de tenis y una moderna pileta de natación.
Antiguo edificio, remodelado por el arquitecto Roberto H. Lomax entre 1906 y 1912.
Durante la gestión de Don Rufino Cosme de Elizalde y Leal como presidente del club, se realizó la compra en 1938 de la isla sobre el río Sarmiento que hoy lleva su nombre. Posteriormente el club adquirió en 1969 la isla Centenario, también ubicada sobre el Sarmiento, luego vendida en 2020.
Destacamos en 1946 el triunfo obtenido por el bote doble par integrado por nuestros remeros Rafael Panelo y Ergasto Chaufen en la regata de Henley, Inglaterra. Al ganar por dos largos de ventaja sobre el bote finalista de la Universidad de Cambridge, conquistan el Henley Royal Regatta Double Sculls. Por primera vez, una representación argentina ganaba en aguas europeas. En aquella ocasión, el trofeo fue entregado a los ganadores por las Princesas Elizabeth (quien luego sería Isabel II, Reina de Gran Bretaña) y Margaret Rose Windsor.
Los logros deportivos continuaron con campeonatos argentinos e internacionales. Cien años después de la fundación del club, el remo continuaba con un crecimiento sostenido, motivo por el cual en 1973 se inauguraron el gimnasio y la nueva pileta de aprendizaje de remo. Los dormitorios, antes sólo para remeros, fueron reciclados al confort de los socios y visitantes. Se instalaron el salón de juegos, con mesas de pool, ping pong y metegol, y el completo gimnasio con aparatos en la planta alta.
En el año 2020 mediante Asamblea se aprobó el convenio del BARC con la cadena líder de gimnasios SportClub, empresa que abrió un moderno local abierto a la comunidad, pileta cubierta, cancha multipropósito y vestuarios completos en una porción de terreno de la Sede Social cedido en concesión temporal. Los socios pueden disfrutar de las instalaciones de la sede SportClub Buenos Aires Rowing con acceso exclusivo desde el interior de la Sede Social. Los nuevos socios del BARC gozan de importante bonificación si desean pertenecer a SportClub en cualquiera de sus gimnasios.
Esta —en apretada síntesis— es la historia del Club decano de nuestro remo que está próximo a cumplir sus 150 años de vida. Orgullo de los argentinos.
Todo lo cual se verá reflejado en el libro aniversario que está en edición.